Pues sí, efectivamente. Me he vuelto un imbécil de los cacharritos, como diría un buen amigo mío, a pesar de no tener un duro. Paradójico tal vez para algunos, natural para otros. La cabra tira al monte, dicen.El caso es que ya tengo nuevo móvil, pda y gps. Todo junto. Se trata del más popular terminal de HTC, Magic (1 millón de unidades lleva vendidas en sólo 2 meses). Y para ser sincero... estoy que no me lo creo. Fuera del grupo geek de turno, la gente me mirará raro. Tengo un terminal del que presumo que no es un Nokia y tampoco un iPhone. Es mi sino. Ya luchamos contra Sony y su Playstation, contra Apple y su iPod, contra Nintendo y su Wii... las tendencias de masas, el prêt-à-porter tecnológico no es mi fuerte. Y no porque sea un snob o un antisistema... sino porque creo que la mayoría de la gente no tiene que ser la que está mejor informada.
Tras mi palito masivo lleno de rencor - que no podía faltar, - poco puedo decir del bicho, ya que todo me parece una maravilla y soy poco crítico con él. A parte de sus consabidos problemas de batería (como todo Smartphone que se precie), lo demás me parece espectacular. Android (su S.O.) es una gozada, el interfaz va suave varios cientos de programas (sólo unas pocas decenas de verdadera utilidad, claro) disponibles hacen que no te canses de probar historias. GPS, integración con las aplicaciones de Google, sistema de notificaciones... una gozada. Cuando le de una vuelta, ya seré más objetivo. Mientras, podéis leer un análisis más concienzudo de un tipo poco cabal. Sólo puedo añadir algo: es blanca, y por ende, madridista.
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